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16 pesos, Pascual de los Relles 10 pesos, Manuel Sanchis 6 pesos, y Bentura Joachin 7 pesos, además
de otros. Y así sucesivamente fueron cooperando hasta reunir la cantidad requerida. Primeramente,
se hizo una junta con las autoridades indígenas para proceder en forma. Y dice textualmente el
documento:

Memoria y razón que yo Blas Miguel y Francisco Xavier y vecino de esta hacienda del molino de
Soria, jurisdicción del pueblo de San Francisco Chamacuero en donde se asientan las personas de los
que dan su limosna de los que estamos haciendo una voz y conformidad para el intento de comprar un
pedazo de tierra en el paraje en donde esta una palma grande junto en el barrio de San Agustín, de una
cuarta parte de caballería de tierra, como se expresa la referida escritura, siendo testigo Don Francisco
Barzena el gobernador, y los demás principales de la dicha República hoy en once días del mes de
agosto de mil setecientos sesenta y un años [1].

Realización de la compra

El terreno de lo que ahora es La Palma lo vendió el sacerdote
Salvador José Faxardo, heredero de los bienes que quedaron por
la muerte de Luis Antonio de Menchaca, que fue presbítero de
la Villa de San Miguel, y que fuera dueño de la hacienda de
Melgar en jurisdicción del pueblo de San Francisco de
Chamacuero, dicho terreno lo había comprado Don Luis
Antonio de Menchaca al sacerdote Faustino de Ocampo, el 11
de noviembre de 1750, y se componía de un cuarto de caballería
de tierra (que equivale a un poco más de 10 hectáreas) y el
sacerdote Faxardo declaró en nombre de sus herederos y
sucesores, que vendió ese terreno a Blas Miguel y Francisco
Xavier, indios del barrio de San Agustín en Chamacuero. Como
las personas que representaban a los demás indios del mismo
barrio y que cooperaron con su limosna para realizar esta
compra que había de ser para la Santa Cruz que los mismos
indios tenían en su capilla de la hacienda del Molino, y donde Altar principal de la capilla de la Santa
también iban a repartirse lotes para sus viviendas y recaudar Cruz.
dinero para la función anual que se celebraba el día primero de Foto: Carlos Fco. Rojas Gómez.
“carnestolendas” (Carnaval) con misa de tres ministros y sermón e igualmente para el adorno de la
capilla.

Se menciona en los documentos que el costo total de la compra fue de $300.00 (trescientos pesos),
y de limosnas o cooperaciones se juntaron 340 pesos, por lo mismo sobraron cuarenta pesos, pero
Blas Miguel y Francisco Xavier se quedaron con ese dinero, y aunque en las listas de cooperaciones
se mencionaba que Blas Miguel dio treinta pesos y Francisco Xavier dio solamente tres pesos, en
realidad no dieron nada pues se quedaron con el “relicuato” que es lo sobrante, de modo que en lugar
de contribuir con algo se quedaron con lo que otros habían dado para la adquisición, y el único mérito
de estos dos individuos era haber ido a San Miguel a realizar el trato, pero además estos pusieron las
escrituras a su nombre que fueron motivo de reclamaciones y pleitos como veremos adelante. La
compra se realizó el día 11 de agosto de 1763 y esa fecha debe de ser considerada como la del
comienzo de dicho barrio. También mencionan los documentos que los lotes o solares que se
repartieron fueron inalienables esto es, que no podían ser enajenados ni ser despojados de ellos. El

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